Desde que la Asociación Cultural inció sus actividades con aquella I Semana Cultural en el año 2008, la excursión siempre ha sido objeto de una cuidada programción y de una especial atención, procurando que no falle ni un solo detalle y buscando siempre el disfrute y el deleite de todos aquellos que se apunten. Este año se programó la excursión a la ciudad castellana de Burgos que tiene mil razones para ser visitada. Sin ir más lejos, su catedral, denominada Real Basilica Catedral de Burgos, es de un interés fuera de toda duda. Ante el exceso de demanda de las plazas de autobús inicialmente reservadas, fue necesario contratar un segundo autobús que tenía las mismas condiciones de comodidad y confort que el primero. No por apuntarse más tarde, los viajeros iban a viajar en peores condiciones que los que madrugaron más para apuntarse. Así en la mañana del martes 6 de agosto partimos de la plaza de la Picota 74 viajeros (volveríamos 76) cómodamente sentados en dos autobuses de lujo. El viaje transcurrió con normalidad hasta el lugar de Villaherreros, donde teníamos prevista la parada de rigor para tomar café e ir al servicio. Se siguió viaje ya, por autopista, hasta la ciudad de Burgos, donde se llegó a las 10,45 horas, como se había programado. En tres minutos caminando estábamos ya en el primer punto importante de nuestra visita: El Museo de la Evolución Humana. Este moderno museo tiene su razón de existir gracias a los numerosos e importantísimos hallazgos encontrados en el yacimiento de Atapuerca. Allí se pasó gran parte de la mañana contemplando gran variedad de hallazgos importantes en el devenir de la historia de la humanidad. La visita terminó en torno a la una menos cuarto. Desde allí nos dirigimos hacia la plaza de la catedral para iniciar la parte más lúdica de nuestra excursión: el viaje en el tren turístico de Burgos. Hubo que hacer dos turnos para acoger a todos los excursionistas. Durante el viaje, que tiene su propia megafonía, se nos ofrecieron detalles muy importantes de la histórica ciudad de Burgos, en tres idiomas. Acabado el divertido viaje, fue el momento de reagruparnos para la hora de la comida que se había contratado en el Mesón de los Herreros, en pleno centro de Burgos. El silencio y el esconder la cabeza bajo el ala, como hace el aveztruz cuando barrunta peligro, no beneficia a la asociación y tenemos que reconocer que este año el restaurante elegido, eso sí, con la mejor voluntad (que nadie lo ponga en duda), no fue el más apropiado para una excursión como la nuestra. De los errores hay que aprender y tomamos nota. Aún así, la gente puso su mejor cara, dio buena cuenta de los menús elegidos y la comida transcurrió en un buen ambiente, casi familiar. De nuevo salimos a la calle caminando para llegar a las cinco de la tarde a la visita a la catedral. Nada vamos a decir aquí sobre la catedral de Burgos que no esté escrito ya. Es uno de los más bellos monumentos del arte gótico que mereció ser Patrimonio de la Humanidad ya en 1984. Fue construida por Fernando III, el Santo, en 1221 y consagrada como lugar de culto en 1260. Luego ha ido ampliando su construcción inicial con numerosas capillas y claustros. Llama la atención la enorme cantidad de enterramientos que hay en su interior. El más llamativo lo vimos en la denominada capilla de los Condestables, quizás el lugar que más llamó la atención de nuestros excursionistas. La visita a la catedral causó admiración por su esplendorosa belleza, su recia arquitectura y por los innumerables tesoros que alberga. Al término de la visita a la catedral, y por un error de coordinación, no se visitó la capilla de San Nicolás de Bari, que figuraba en la programación con la entrada pagada. Algunos excursionistas la visitaron por libre pagando la entrada de su bolsillo. Un nuevo error que tenemos que asimir como propio y que no puede volver a ocurrir. El resto del tiempo hasta las ocho de la tarde la gente lo consumió a su gusto.Unos pasearon por la ciudad y otros hicieron algunas compras. Otros aprovecharon para visitar al P. Tomás, y otros, para visitar a familiares que viven en esa hermosa ciudad. Se partió de Burgos con dirección a Acebedo a las 8 y dos minutos y se llegó al pueblo en torno a las 11 de la noche. |