DÍA 12 DE AGOSTO DE 2010, JUEVES

COCNIERTO DE MÚSICA CLASICA

El que en Acebedo se escuche, al menos una vez al año, música culta, es un empeño de la Asociación Cultural. El del año 2010 es el tercer concierto que se organiza y, después de comprobar los resultados, estamos ciertamente satisfechos y el público asistente, en esta edición con presencia de los pueblos vecinos, nos anima a continuar con esta actividad. Un concierto de música clásica no es un espactáculo de masas, si exceptuamos a André Rieu. Se trata más bien de un público muy escogido que pretende deleitar sus oidos al son de hermosas melodías que le hacen sentirse bien, en un ambiente recogido. Nada mejor que la iglesia de San Nicolás de Bari para alcanzar esa magia propia de los conciertos de música clásica. La excelente acústica que presenta y el grandioso retablo gótico, unidos a un público muy respetuoso y atento y a un cuarteto de la calidad y la virtuosidad de "Ad Libitum" no cabe duda que dieron como resultado un extraordinario concierto.

El cuarteto "Ad Libitum", un grupo atípico en el panorama de la música clásica debido a su extraña formación, está formado por cuatro virtuosos, todos ellos profesores de sus respectivos instrumentos. Así a los clásicos violín y celo unieron una guitarra clasica, que da mucho cuerpo al grupo, y una flauta travesera, que da un extraordinario dinamismo y viveza al conjunto. Grandes profesionales ya que se presentaron con dos horas de antelación para ensayar en el mismo escenario del concierto, deleitaron al público con un repertorio compuesto, sobre todo, por obras de música pop, de autores tan conocidos como The Beatles o Simon and Garfunkel. Esto es debido a que no hay repertorio clásico escrito para tan peculiar formación y los componentes hacen sus propias versiones de temas de todo tipo. Al punto de que, durante el concierto ofrecido en Acebedo, solo acudieron a un autor clásico, Mozart.

Al final del concierto fueron largamente ovacionados, ofreciendo dos propinas que merecieron nuevas ovaciones del público asistente. Una vez terminado el concierto los músicos manifestaron haberse encontrado muy a gusto y alabaron la excelente acústica del recinto sugiriendo la posiblidad de grabar su próximo trabajo en disco en nuestra iglesia de Acebedo. Aunque no nos corresponde conceder ese permiso, apoyaríamos esa posibilidad de convertir nuestra querida iglesia en un gran centro de grabación.

 

La velada terminó degustando un vino de Moscatel y los excelentes bollejos que fabrica la panadería Valdeón, muy del gusto de todos los asistentes, ya que no quedaron ni las migas. El público se fue a sus casas feliz y satisfecho y con el regusto de haber disfrutado de una actividad musical de gran calidad y al lado de su propia casa.